Invitamos a cenar a un profesor que, a pesar de no ser nuestro profesor referente, nos ayuda en todo lo que hacemos y acabamos la velada bañándonos en la piscina. Al día siguiente, su mujer, sin perder la sonrisa de la boca, nos informó que no podíamos traer a nadie de fuera a la piscina ya que los productos de limpieza costaban muy caros y que si queríamos traer a alguien deberíamos pagar el mantenimiento….”Vous avez compris mademoiselles?”
2 comentarios:
Te funciona bien la intriga ;-)
Sigue así, hermana.
Vaya contestación y mala folla que tienen los dueños de la casa...
Y sí, sigue con la intriga, que hace que nos pasemos de vez en cuando a ver cómo termina la historia! XD jejejeje
Besitos wapa y a cuidarse ;)
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